Lanzarote | Fuerteventura
Es una afección muy conocida por la población trabajadora puesto que a menudo se le relaciona con las actividades laborales ( Enfermedad laboral ), aunque las mutuas laborales son reacias a reconocerla como afección laboral. Por eso se ven obligados a acudir al traumatólogo por su cuenta.
Se trata de un síndrome compresivo doloroso de mano y muñeca que comienza con parestesia o alteraciones de la sensibilidad de los dedos (hormigueo y pinchazos en la yema) y aveces despierta al paciente de madrugada para agitar la mano y abriendo y cerrando los dedos puede volver a sentir sus propia mano. Si no se controla a tiempo, se convertirá en severo y entonces habrá que ir a quirófano para evitar pérdida de fuerza de la mano y atrofia de la musculatura irreversibles. En sus estadíos iniciales (leve) se debe bajar el ritmo del trabajo manual y se indica fisioterapia más analgésicos orales. Si tenemos que intervenir, podemos hacerlo mediante cirugía minimamente invasiva y bajo anestesia local sin la necesidad de sufrir grandes heridas quirúrgicas ni riesgos perianestésicos.